Un importante porcentaje de la población sufre por el aspecto de sus orejas,viendolas como muy separadas. dela cabeza. Este aspecto se presenta desde la niñez siendo motivo de distintos sobrenombres y burlas, lo que puede afectar psicologicamente. Esta situación, que médicamente se conoce como orejas aladas u orejas en soplillo, tiene tratamiento definitivo a través de la cirugía, tanto para niños como para adultos. Esta cirugía se denomina otoplastía.
La otoplastía es una intervención que, mediante una incisión en la parte posterior de la oreja, modifica el cartílago aproximando la oreja a la cabeza, para tomar una aspecto más natural, con resultados inmediatos.

Una otoplastia suele durar entre 1 y 2 horas, la técnica específica empleada dependerá del problema concreto.
Generalmente se realiza una pequeña incisión en la parte posterior de la oreja para exponer el cartílago auricular. Después se adapta el cartílago para obtener una oreja más natural. La cicatriz resultante de la otoplastía queda disimulada detrás de la oreja. La mayoría de las veces, aunque solo una oreja parezca anormal, se intervienen las dos para conseguir una mejor simetría.
La mayoría de los pacientes, niños y adultos, se encuentran bien a las pocas horas de la cirugía.
Se coloca una curación sobre las heridas, para proteger las incisiones recién realizadas. Es importante seguir las instrucciones de su cirujano. Durante el primer mes no se debe realizar actividad física intensa para evitar mayor inflamación de las orejas lo que puede aumentar el riesgo de complicaciones..